He tenido algo abandonado el blog por causa de ciertos cambios laborales que me han dejado sin tiempo y con la cabeza demasiado atareada durante estas últimas semanas. Así que he decidido aprovechar este
impasse improvisado para renovar un poco el aire y su imagen.
Cuando me lancé a escribir el verano pasado, no tenía ni idea de en qué se iba a convertir este pequeño espacio personal. A lo largo de estos meses, el blog ha sufrido unas cuantas crisis de identidad a la par de las que padece habitualmente en su persona la susodicha que le da vida...
A día de hoy, creo que es simple y necesariamente un cuaderno de notas donde apunto cosas que me suceden y pensamientos que me vienen a la cabeza. También donde comparto algunos proyectos que descubro, además de mis modestas aportaciones ilustradas o tejidas.
Así que nada lo identifica mejor que un lápiz y un papel.
Para ambientar estos nuevos aires, de fondo escucho la brisa atlántica de
Xoel López, que llega también con ritmos renovados tras su regreso de Argentina.