7.4.13

94.




No  tengo tenía intención de convertir el blog en una sucesión de experiencias de "madre primeriza en apuros" que para eso ya hay muchos y algunos muy buenos (soy seguidora de 39semanas de Esther Gili, la vida  con un bebé ilustrada con mucho humor, recomendable) pero la realidad del día a día lo absorbe todo y poco más tengo para contar que mis aventuras y desventuras con nuestro nuevo compañero de habitación.

A un intenso mes vista de su llegada, puedo decir que los vaivenes emocionales son el orden del día. Te puedes quedar tranquila achacándoselo todo al baile de hormonas pero yo creo que lo de dormir en intervalos de 3 horas, en el mejor de los casos, influye y mucho...¡y el caso es que increíblemente te levantas descansada!

A estas alturas creo poder decir que ya he logrado asumir que existen tantas versiones y teorías sobre cómo cuidar a un recién nacido como matronas, enfermeras, pediatras, libros de autoayuda de turno, abuelas, tías, suegras, amigas con hijos y sin ellos o incluso señoras que te cruzas por la calle o que se sientan en la mesa de al lado en un bar (y esto es literal). Así que buscar respuestas concretas a esas preguntas concretas que te acechan y corroen es bastante complicado y quedarse con la sensación de que no sabes si haces bien es lo más habitual. 

Así que en esas estamos, aplicando teorías de uno y otro y siguiendo ese instinto que como madre se supone que tienes innato para lidiar con el minuto a minuto de un pequeño que nos tiene hipnotizados. Nunca pensé que tres kilos y medio pudieran abarcar tanto. 

Seguiremos informando...

3 comentarios:

  1. Uy, hacía mucho que no pasaba por aquí! Felicidades enormes!
    Un abrazo

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  2. Es inevitable que durante un tiempo sea el centro de tu vida, no? O sea, más o menos durante los próximos 50 años... jejeje...
    Siempre me llama mucho la atención el interés de la gente por opinar sobre lo que los papás deben hacer o dejar de hacer. Es como si de repente los padres perdiesen todo su albedrío
    Cuéntanos más cosas, que todo resulta interesante, dependiendo de quién lo viva.

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    Respuestas
    1. 50 años, sí...bufff, qué vertigo!jaja
      Desde el momento en que perfectos desconocidos te asaltan por la calle con algún apunte innecesario, te das cuenta de que los niños son una especie de imán. Debe pasar algo parecido con los perros, suerte que los gatos no pasean fuera de casa, sólo en Instagram :)

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